Patxi Pascualena y Luis Barcia se plantearon la posibilidad de realizar un proyecto innovador. Se les ocurrió que podía ser interesante pensar en el reciclaje de baterías de automóvil. Y pensaron en la posibilidad de desensamblar los diferentes elementos que las forman para después proceder al reciclado separado de cada una de ellas. Y (no podía ser de otra manera) decidieron que debía tratarse de una tarea que no se realizara de modo manual, sino automatizada (estamos en el siglo XXI); pero no de cualquier forma, sino utilizando un robot industrial. Ciertamente, se trata de una tarea idónea para ser robotizada: es repetitiva y se manipulan sustancias tóxicas, nocivas (ácido sulfúrico). Y la idea es actual (preocupación por el impacto medio ambiental) y novedosa.
Así comenzaban un trabajo que han sentido muy suyo: la idea fue suya, y tuvieron que acudir a Internet, a organismos oficiales y a algunas empresas. En busca de más información para poder analizar la viabilidad del proyecto, el posible mercado, la rentabilidad de la aplicación….
Una vez comprobada la viabilidad y rentabilidad del proyecto había que llevarlo adelante. Patxi y Luis profundizaron en los principios electroquímicos del funcionamiento de la batería. Entendiendo cada una de las partes de la misma aprendiendo también acerca de los diferentes métodos de corte que existen. Finalmente seleccionaron el corte por chorro de agua para separar la parte superior de la carcasa de la batería.
Para ello contamos con la colaboración de Francisco Casal de INALI S.L. que les recibió en su empresa en Munguía. Les facilitó información sobre la problemática del corte y las soluciones posibles, así como información comercial de las tecnologías y dispositivos existentes.
Y tuvieron que poner en marcha sus habilidades manuales y construir una maqueta de una batería y las rejillas que hay en su interior en marquetería. Esto para poder realizar la programación del robot y las pruebas en el laboratorio.
Sabemos que para llevar este proyecto a la práctica habría que mejorar algunos de sus aspectos; pero también sabemos que es un trabajo en el que se fueron metiendo cada vez más. Y les fue enganchando y les conquistó. Tanto que alcanzaron un resultado mejor del que se habían imaginado, porque también le dedicaron más de lo que en un principio se habían imaginado.
Fuente: Revista Alumnado – ESIDE (Universidad de Deusto) 2005